Otro día más de mi nueva vida, otro día más parecido al anterior, y todavía queda un mes. Pero... ¿No os sentís bien cuando hacéis lo correcto? No se, por ejemplo, cuando dejáis el cadáver en la puerta de su antigua casa en vez de tirarlo al río, pues eso.
La diferencia de hoy la marcan dos cervezas, muchas risas, algunas fotos y unos pantalones rotos, ya sabéis, por la entrepierna. Parece que no aprendo que aunque yo sea flexible mi ropa no siempre lo es, quizá sea por mi reciente pasión y, por qué no decirlo, drogadicción (si se escribe así bien y si no, también) al Monster.
Hoy el post es breve, ¿qué le hago? En época de exámenes es lo que hay, pero vaya, que si queréis que os cuente los entresijos de el conflicto en los grupos o cómo funciona vuestro cerebro, yo encantado. Antes de despedirme os dejo con una frase de una canción, que, personalmente, me fascina: The innocence is gone. A ver si alguien me dice qué canción esAJAJAAJAJAAJAJAJAJAJAJAJAJAAJAJ como si me leyeran.
Algo malo: Tengo acumulados mil y un besos para alguien en especial que tiene que llegar con el sol de mediodía.
Algo bueno: La risa es la mejor de las medicinas.
You know you love me.
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